Contacto Boletín

Nota informativa | Turismo Responsable | Argentina

23-07-2018

La RATuRC sigue firme en miras a cumplir 10 años de trabajo

Ramiro Ragno | Alba Sud / Fundación Buena Vida

Constituida en 2009, la Red Argentina de Turismo Rural Comunitario está conformada pormás de 50 experiencias colectivas campesinas e indígenas ubicadas en diversas regiones y unidas por objetivos comunes.


Crédito Fotografía: 1a reunión de la Red de Investigadores en TRC vinculada a la RATuRC

Lejos de ser lo que muchos perciben o se imaginan, Argentina es un país plurinacional y multicultural en donde la población campesina y las comunidades indígenas resisten en sus territorios ancestrales, conservando sus costumbres y dando continuidad y pertenencia a la América profunda, diversa y muchas veces pendiente.

Un espacio campesino e indígena

La RATuRC, Red Argentina de Turismo Rural Comunitario, nace en 2009 en el marco del 1er. Encuentro Nacional impulsado por el Ministerio de Turismo y con el apoyo de técnicos territoriales de la Secretaría de Agricultura Familiar y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) dispersos a lo largo de casi todo el país, así como los organismos provinciales de turismo. A ese encuentro le sucedieron otros tres más, promoviendo el intercambio de experiencias, la construcción de una organización participativa y representativa, diseñando herramientas de gestión, evaluando impactos, generando alianzas intersectoriales, promoviendo políticas públicas y una actividad más inclusiva y solidaria.

De este modo, hoy la RATuRC contiene a más de 50 experiencias colectivas campesinas e indígenas ubicadas en diversas regiones ambientales y rurales unidas con objetivos comunes: generar un espacio de visibilidad hacia afuera como de contención entre ellas; gestionar recursos y normas a favor del buen vivir y el respeto de las comunidades; formarse en la prestación de servicios turísticos; promover alianzas comerciales e intersectoriales a favor de la rentabilidad con sostenibilidad. Emprendimientos indígenas de la selva de Iguazú y de las Yungas del Noroeste, de los Andes a la Patagonia y organizaciones campesinas mestizas del monte santiagueño y formoseño hasta pescadores artesanales del río Paraná, solo para dar ejemplos, conforman esta red federal cuya autoridad la constituye un Comité Nacional elegido en asamblea en cada encuentro. Naciones indígenas Mbya Guaraní, Atacama, Kolla, Diaguita Kallchakí, Avá Guaraní, Wichi, Mapuche, Huarpe, Tastil, Omaguaca son algunas de las culturas originarias que son parte de esa red.

Esta red argentina entiende al turismo rural comunitario como un modo de gestión asociativa, en donde una persona jurídica es la prestadora de servicios turísticos y cuya oferta nace del respeto y el consenso vecinal y comunal y se fundamenta en su cosmovisión ancestral y en sus derechos.

La RATuRC cuenta entre las propuestas turísticas, ofertas tan disímiles como senderismo intercultural con interpretación de la naturaleza; actividades vivenciales en donde el viajero aprende a cocinar o a hacer artesanías con sus propias manos; puede esquiar en la nieve; cosechar verduras frescas de huertas ecológicas; andar en bote o a caballos, alojarse en casas de familia o bien en posadas o en camping, sólo para dar ejemplos. Pero todos tienen en común: los emprendimientos que prestan los servicios al viajero son colectivos campesinos indígenas.

Reuniones en Buenos Aires

El mes de julio es temporada de vacaciones escolares y por ello, es temporada alta para el turismo nacional, pero a pesar de ello, y dejando sus actividades de lado, cuatro miembros del Comité Nacional de la RATuRC viajaron a la ciudad de Buenos Aires para reunirse con diferentes organismos y potenciar la red. De este modo, se reunieron a trabajar con el Secretario de Turismo de Argentina, Alejandro Lastra; con los Subsecretarios de Desarrollo Turístico y de Promoción, Mariano Ovejero y Fernando García Soria, respectivamente; y con el Subsecretario de Agricultura Familiar Felipe Crespo y ambos referentes técnicos. De esta extensa reunión, los funcionarios de turismo se comprometieron a impulsar normativas adecuadas en las provincias que se demanden; a financiar próximas reuniones; a generar un instrumento de reconocimiento institucional a la red y a diseñar material de promoción.

El Comité Nacional de la RATuRC con el Secretario de Turismo de la Nación y el Subsecretario de Desarrollo Turístico.

La gran ciudad de cemento fue testigo de encuentros y conversaciones importantes para la gente de la tierra que llegó de lejos. Mate en mano y con su collar de semillas, Santiago Martínez conoció por primera vez la capital argentina, lejos de su tierra guaraní y colorada. Sebastián Pastrana el más joven del Comité RATuRC, bajó de los valles áridos de su Amaicha indígena para sumarse al grupo, que se completaba con el mapuche Roberto Chino Vélez y el cooperativista rural Javier Luquet que vinieron desde la provincia de Río Negro.

Luego de la jornada de trabajo entre la RATuRC y los organismos gubernamentales de turismo y agricultura, se organizaron dos reuniones muy importantes: la visita de Jhonny Edmonds, presidente de WINTA Alianza Mundial de Turismo Indígena y la creación de una incipiente pero pujante red de investigadores y universidades vinculadas al turismo rural comunitario. La generación de alianzas intersectoriales estaba en la agenda y en los objetivos de la RATuRC y por ello, se establecieron vínculos de cooperación mutua con ambos espacios, buscando el trabajo coordinado con la academia, las agencias de viajes, el sector público y otros actores.

El Comité Nacional de la RATuRC con el presidente de WINTA Alianza Mundial de Turismo Indígena. 

Hacia el décimo aniversario

En 2019, la RATuRC cumple 10 años de trabajo y desea llegar para la fecha, con un contexto normativo consensuado en todo el país; con un acuerdo con el sector privado del turismo; la elaboración de herramientas de comunicación y la participación en ferias y encuentros.

Paso a paso, de una en una se pelan las tunas dicen en el campo. La RATuRC avanza, negocia, suma y se suma, pero no retrocede ni claudica sus principios de autogestión, de defensa de los derechos de las comunidades y del reconocimiento de todos los emprendimientos como actores comerciales de sus propias propuestas.

 

Este artículo se publica en el marco del proyecto «El Objectius de Desenvolupament Sostenible i el turisme: estratègia d’educació per al desenvolupament», ejecutado por Alba Sud con el apoyo de la Agència Catalana de Cooperació al Desenvolupament (ACCD) (convocatoria 2017).